Eran las 3 am cuando sonó el despertador. El dragoncito desperto y quitó las lagañas de sus ojos. La ropa ya estaba lista y se vistió aún adormilado. Al cabo de algunos minutos ya estaba listo así que cargó los dos enormes bultos que lo acompañarían y salió en busca de transporte. Un taxi llegó y el dragoncito subió metiendo los 40 kg en equipaje que llevaba a sus espaldas. El viaje comenzaba........Al llegar al aeropuerto parecía un pueblo fantasma, casí no había gente salvo por los de seguridad y unos cuantos que acampaban cerca del area de fast food area. Todo empezaba bien. Ya en el avión el compañero de asiento inició conversación, este canadiense amistoso pregunto si era la primera vez que el dragoncito volaba y pues no pero ya no lo recordaba. El despegue no fue la gran cosa, la maldita turbina hacía demasiado ruido pero nada más. La gente y todo comenzó a hacerse más y más pequeño hasta que los autos parecian del tamaño de una uña de dedo meñique, "tiny little people" dijo el canadiense, risas. El reino de arriba es impresionante. Primero, grandes extensiones de tierra, montañas, desiertos, pueblos enteros con albinos habitantes, pachoncitos. Borregos enormes hechados, inmobiles. Mares y mares de ropa blanca recién lavada. El paisaje era lindo pero despues de un rato al mirar por la ventana todo hasta donde alcanzara la vista era blanco. Luego de algun tiempo, como 3 horas todo cambió a grandes extensiones de "azúcar", Esto ya no se veía tan pachoncito, cubría la tierra y se veía frio. En algunas partes millones de puntos negros la cubrían como si fueran miles, millones de moscas paradas sobre montones de azúcar regados en una mesa gigantesca. Al cabo de 5 horas esto empezaba a ser algo tedioso, y si esto pasa en un vuelo de 5 horas me imagino uno de 14, debe ser muy cansado. De repente la forma migratoria llegó y fue llenada por el dragoncito correctamente y minutos despues se fue anunciado el aterrizaje. El cielo que en este momento aún era suelo parecia un gran gran algodón de azúcar, uno tan grande que parecía haber sido creado por Dios na'mas pa' comerselo y sentir lo que es una indigestión. El avión comenzó a bajar lentamente hasta que se estrelló contra el algodón de azucar, era un lugar extraño, como el cielo en las peliculas y eso, la luz entraba por los hoyos del algodón y hacían que todo se viera como rosa, luego el algodon paso de suelo a cielo y el dragoncito pudo ver el mar, algo verdoso pero como que cambiaba de color cuando le pegaba la luz, algo así como la aurora boreal. Entonces el mar fue sustituido por pavimento, se sintio un ligero "bache" y una voz se escucho mientras nos deteniamos: "El tiempo total de nuestro recorrido fue de 5 horas 25 minutos, nuestra velocidad de 620 km por hora, la temperatura es de -5 grados centigrados, bienvenidos a la ciudad de Vancouver, gracias por volar con nosotros".........
coming soon: photos
Who let the dogs out?.....
Life goes on......
So long and thanks for all the fish
Time machine.....
Helado de cereza....
Las Montañas desde New Westminster....
Charlie Ice Age version....
Christmas Steps....
